Caleta Olivia, 15/09/2014. En una nueva entrega, ofrecemos al lector un análisis del escenario Político en Caleta Olivia y sobre los rumbos inciertos de cara al 2015.
La gestión municipal de Caleta Olivia tiene un futuro bastante incierto, la ciudad se ha tornado ingobernable y la incertidumbre de las señales a nivel nacional genera mayor desconcierto entre quienes saben que el próximo Intendente no puede ser un improvisado o un descendiente del actual mandatario. Por ahora, nadie parece avanzar demasiado en forma abierta, y todo se cocina en el análisis, la rosca y declaraciones elípticas y calculadoras. También el inventario de problemas y descalificaciones personales alimentan los programas mediáticos mañaneros. Es así que en base a los guarismos de encuestas se proyectan como profecías que se auto cumpliran , ya que muchos sueñan con que los votos que alguna vez recibió su sector sigan estando allí disponibles por la ciudadanía. OBSERVADOR CENTRAL en esta oportunidad invita a reflexionar sobre las tres principales fuerzas políticas con posibilidades de alcanzar la Intendencia de Caleta Olivia, es sólo un punto de partida de una carrera que todavía no larga.Gobernar Caleta Olivia ¿Quién le pondrá el cascabel al gato?
En el análisis de la política empírica, hay tres criterios del accionar de las fuerzas políticas que para el ciudadano común suelen pasar inadvertidas: a) las verdaderas intenciones de fondo y sentimientos de los líderes de cada sector; b) el auto conocimiento del líder de sus posibilidades reales de alcanzar el cargo; c) los factores externos al propio sector al que pertenece el líder de cada fuerza política. Es decir todos aquellos hechos de la política y la economía nacional y provincial que a la hora de la largada de candidaturas nos indican donde se está realmente parado. Entre las distintas fuerzas políticas locales que tienen posibilidades efectivas de alcanzar el Gobierno de la localidad, sobresalen en nombre del Radicalismo el joven Facundo Prades, La Izquierda representada por Omar Latini, y por el Frente por la Victoria el sector de Fernando Fabio Cotillo. Obviamente, son muchos más los candidatos que legítimamente sueñan con gobernar la ciudad y ojalá logren proyectarse para enriquecer la democracia, y tal vez puedan darnos sorpresas y revertir cualquier análisis, pero nobleza obliga: La Ley de Lemas, por ahora, nos seguirá indicando y hasta nuevo aviso que la balanza se inclinará dentro de estas tres fuerzas mayoritarias.
Caleta Olivia la ciudad y el escenario que habrá que gobernar
La situación que vive la ciudad suele ser definida como “anárquica” y los cientístas políticos seguramente le atribuirían que estamos ante una situación de crisis de gobernabilidad, mientras que cualquier sociólogo diría que estamos frente crisis de legitimidad social del rol del poder ejecutivo municipal. Lo cierto es, que el crecimiento de la planta pública, el desguace del equipamiento municipal, el abandono de los servicios urbanos, la carencia de un plan de desarrollo para el empresariado y PyMes, la desocupación abierta y encubierta, son parte del paisaje actual al que debe sumarse el estilo confrontativo y violento de su Intendente actual, que ayer Máximo Kirchner invitó a combatir con ideas y debate. Gobernar la ciudad en el futuro no podrá ser en consecuencia para cualquier improvisado. Es decir, que sea quien sea el Intendente de la ciudad, deberá estar preparado, capacitado, y si es del sector peronista, debería grabar a fuego la cátedra que la semana pasada, dio Aníbal Fernández en el complejo municipal sobre los valores de la conducción política. Sin lugar a dudas que Conducir no es un tema de personas, sino de fuerzas políticas y proyectos de ciudad. Hoy, Caleta Olivia está fragmentada socialmente, y gobernar la ciudad hoy está limitada a resolver cómo pagar a los empleados municipales a fin de mes, más que de pensar cómo administrar y gerenciar la ciudad y sus demandas. Por ello, no es raro que Auto convocados de todo tipo intenten tomar el rol del Estado y recuperar el servicio público que hoy está ausente. ¿Quién está pensando el futuro de Caleta Olivia en un escenario donde no lleguen recursos del Gobierno Nacional?; ¿Quién está pensando de manera sería el futuro de más de 5.000 familias del Estado municipal a partir del 2015?
Un punto de partida objetivo y subjetivo: Los últimos datos electorales
Las elecciones de Diputados nacionales del año 2013, movilizó en la ciudad 30.128 votos efectivos (80% del padrón), siendo que Unión para Vivir alcanzó 9.920 (34,38%), el Partido Obrero 6.470 (22,27%), El Parido Justicialista 5.899 (20,44%), El Frente para la Victoria 5.848 (20,27%), el MST 717 (2,48 %). En pleno contexto de “atar con alambre fino” la relación del Gobernador con el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, el Frente para la Victoria hizo una buena elección en relación al gran derrotado que resultó el Justicialismo dada la mala elección que realizó el candidato de Daniel Peralta. Por su parte el Frente para Vivir Mejor, Omar Latini, hicieron una muy buena elección, sin la presencia de Facundo Prades en la arena electoral. Pero los votos de una elección a otra no se transmiten automáticamente, y la figura del líder es importante, sobre todo en una sociedad donde los programas de Gobierno no existen más que en discursos aislados y declarativos; por ello en un escenario de “posible” elección de Intendente hoy la unificación mediante Ley de Lema del Frente para la Victoria y el Justicialismo obtendría la Intendencia, tal cual sucedió el año 2011 donde Eugenio Quiroga (6905 votos) por menos de 500 votos perdió ante José Manuel Córdoba (7031 votos), quien siendo a su vez el menos votados en relación con Facundo Prades (7576), terminó siendo el Intendente de la ciudad sin haber sido votado por el 71 % del padrón.
Omar Latini, Histórico y legítimo candidato de las fuerzas de Izquierda local y provincial. Las dos últimas elecciones ha crecido exponencialmente, producto de su mantenimiento de trayectoria de discurso inverso al dominante que basa en la descalificación de todo lo que tiene olor al kirchnerismo. Producto de su militancia activa, en parte por las internas del Frente para la Victoria y el Justicialismo, en parte por el vacio del voto que representa la “indignación” que había logrado capitalizar Prades de la ciudad y que se transfirió hacia Omar en las últimas elecciones. Omar, cuenta como ventaja con una militancia que lo ha constituido como líder indiscutido que ha formado su identidad de dirigente por pertenecer a los trabajadores del Estado. Su agenda siempre ha sido muy amplia pero hoy con la problemática del agua ha cooptado el movimiento Auto convocado de zona Norte como eje para ampliar su legitimidad social. Para quienes siguen los procesos electorales su figura marca un personalismo evidente sin que se vean aparecer en los últimos 20 años cuadros formados para remplazarlo. Resulta siempre el único candidato de su sector. También resultan controvertidas sus postulaciones, dado que cada vez que se postula para cargos electorales pierde en el sistema político que critica, pero el permanece como figura dentro de su sector y sigue creciendo. La interrogante que deja para los análisis es por qué no se postula en los que efectivamente podría llegar a ganar?. Hoy, el caudal electoral le permitiría llegar con comodidad a una Concejalía como mínimo, y tal vez disputar la Intendencia si los votos de las últimas elecciones no son parte de lo que habrían de votar a Facundo. Si nos encontramos con que Latini aparece en la lista de Gobernador deberíamos pensar que su vocación es claramente militante y altruista pero funcional a nunca disponerse a gobernar.
Facundo Prades. Hijo de un ex intendente Radical controvertido «monje negro” en sus ingenieras electorales, ha trasladado con éxito sus dotes personales, su carisma y su capacidad oratoria en la política a Facundo, quien ha instituido en un estilo de vida la política como herencia. Facundo, desde el radicalismo local se declara adversario indiscutido de Eduardo Costa. Este último advierte que es “prisionero” del caudal de votos que podría aportarle Facundo para llegar al gobierno Provincial. Eduardo sabe de esto, y también sabe de las relaciones de Facundo con Daniel Peralta, es decir sabe con exactitud quien podrá más a la hora de cautivar al líder local. Por otro lado, el discurso de Facundo se basa en la descalificación constante de Fernando Cotillo, sin que la ciudadanía alcance a entender por qué no habla del gobierno de José Manuel Córdoba y más bien se dedica a organizarle eventos para ayudar a gobernar la ciudad. Facundo ha realizado un excelente trabajo con la palabra y con la militancia radical que cree legítimamente en él. Será esta militancia la que difícilmente le perdonará si las sospechas se comprueban y no define jugar dentro del Radicalismo y apoyar de manera efectiva a Eduardo Costa. Este debería ser el escenario normal del Radicalismo, cualquier otra opción de “Frentes” dejaría muy mal parado a los ciudadanos que ven en Facundo una opción de gobernar la ciudad.
Fernando Cotillo. Su figura resulta un acertijo. Nunca logro en forma eficaz comunicar sus gestiones y no se ocupa de desmitificar las sospechas que lo descalifican en lo personal, sin embargo por el extraño efecto de la “Ley de Gresham” mantiene vigencia entre los especialistas de la ingeniería electoral. Cotillo, no es el candidato ideal para el arco del peronismo total (Justicialismo y frente para la Victoria) y es la figura que más ataques recibe de todos los sectores, menos de Eduardo Costa, y cada vez es menos “puteado” por Daniel Peralta y recordado por el vecino común de Caleta Olivia. Es sistemáticamente atacado de manera despiadada y personal por Facundo Prades, por Omar Latini y las huestes del Intendente actual. Desde el interior del arco del Peronismo, la mayoría no lo quiere y del Frente para la Victoria queda claro que “no lo quieren”. Basan sus argumentos en su carácter indisciplinado que no lo llevó a asumir la Diputación Nacional en oportunidad que el propio Kirchner le habría pedido asumiera. Sin embargo, en su entorno inmediato también revelan que si esa fue la razón no se explica por qué luego el ex presidente lo consagro Vicegobernador. Su fuerza electoral se basa en tres factores que no hay que desmerecer. Por un lado, posee una estructura política transversal y es la menos personalista. Dispone de tres subsectores internos con liderazgos propios e indiscutidos (Eugenio Quiroga, Juan José Naves y Alexis Quintana); por otro lado detenta el poder real de ser Vicegobernador de la Provincia de Santa Cruz y es respetado por parte del entorno inmediato de la Cristina Fernández. Es también un secreto a voces que Cotillo no quiere volver a ser Intendente y alguno de sus delfines disputará la Intendencia local; mientras tanto él se limita a esperar para actuar.
Los decisivos factores externos en las elecciones de Caleta Olivia
Son múltiples las variables externas, en las que se debe destacar la economía y la inflación, de la cual por ahora prescindiremos y nos limitaremos a la política. Un factor político es sin duda la indefinición acerca de cómo arreglará finalmente Daniel Peralta su retirada de la escena política provincial. Por ahora, con renovado “look y energía juvenil” se mantiene construyendo política y su candidatura para negociar poder con Cristina Fernández y con quien tenga que hacerlo a nivel de localidades y en el escenario nacional continúa con toda fuerza. Sus partidiarios del “interior” y de capital siguen reclamando Congreso y se mantienen en alerta de no quedar pegados a una decisión personalista que negocie el rumbo del justicialismo por una decisión de Gabriela y termine estrellando cualquier posibilidad electoral de sus referentes locales en toda la provincia. Por otro lado, la Ley de Lemas para Gobernador resulta una Incertidumbre y las ingenierías de todo tipo culminarán cuando el grupo de poder que lidera los destinos de la nación y de esta provincia, definan quien competirá contra Eduardo Costa, y si crece demasiado Daniel peralta. Un tercer factor lo representa el propio empresario radical Eduardo Costa, quien deberá innovar en campaña, sacarse el mote de “personalista” y en Caleta Olivia romper el cerco que sus voceros locales le provocan generado un cierre de acceso a militantes, ciudadanos a la vez que potencian su conflicto con Prades. ¿…y los ciudadanos de Caleta Olivia? a todos ellos la ciudadanía parece no reclamarles Programas de Gobierno en las distintas políticas públicas y compromisos con revertir la realidad en la que todos están de acuerdo: la ciudad ingobernable. Por ahora, la denuncia, la descalificación, la declaración de interés de lo que otros hacen, el promover espacios de auto convocados para solucionar los problemas del Intendente actual. Desde estos contenidos los programas mañaneros también construyen la opinión pública que consume una comunidad que busca ciudadanos. En conclusión, cualquiera sea el resultado de alianzas electorales, lo que no se evidencia es cómo pretenden gobernar la ciudad? Y como se comprometerán para que la Intendencia sea un lugar desde donde se trabaje por el interés colectivo y no un lugar desde donde se construya al pueblo como enemigo.
Por Ignacio Guillotín para OBSERVADOR CENTRAL